Algunos microprocesadores gobiernan el frenado, la aceleración y en algunos casos hasta el claxon.
Según la empresa española S21sec, los automóviles que tienen sistemas TPMS inalámbricos, presentes en casi todos los vehículos modernos, están propensos a ser hackeados.
Por otro lado, la empresa de Symantec, Norton, asegura que a pesar de que aún nos encontramos detrás del volante, las computadoras controlan en las funciones del auto.
“Como están escondidos, la gente no ese percata de que los microprocesadores pueden estar por donde sea a bordo de un auto y que pueden ser desde 30 o 40 hasta 100 diferentes, manejando diferentes funciones en el vehículo”, señaló Stephan A. Tarnutzer, jefe de operaciones para DGE Inc. Proveedor de diseño electrónico para muchas de las armadoras a nivel global.
Norton ha clasificado los riesgos de esta actividad ilícita, entre los que se encuentran la inhabilitación total del auto, controlando su sistema; manipulación del sistema de presión de los neumáticos, que obliga a detener el vehículo por falsas lecturas y permite la localización del auto a través de este sistema; inhabilitación del sistema de frenos, investigadores de la universidad de Washington y la de San Diego crearon un programa capaz de controlar los frenos y apagar el motor del auto.
Fuente: Motorbit
