A días del inicio de la XLVI edición del Gran Premio Nacional de Carreterras Rally Caminos del Inca, que conmemora los 50 años de la prueba, el director de la competencia Juan Dibós, destaca la respuesta que ha habido de los tripulantes inscritos, para el rally más importante del país.
“Caminos del Inca no es una carrera fácil, a pesar que muchos puedan insistir que se trata de una competencia de largo aliento, que la velocidad no prima. No es tanto así. Los especiales son exigentes, porque a veces se maneja más de tres horas seguidas por lo que los pilotos deben contar con gran capacidad y buen rendimiento físico”, contó Dibós a la Revista Nitro.
Uno de los factores determinantes para la organización es la seguridad, detalle que ha tenido distintos puntos de vista, según Dibós. “Hemos recibido desde muy buenas críticas hasta algunas constructivas pero con muy malas intenciones. Muchos solicitan cosas que son imposibles, como que la ruta retorne a la Carretera Central y por estos años no se puede hacer eso, tal vez más adelante”.
Con 84 pilotos oficialmente inscritos y muchos con experiencia en la prueba, Juan Dibós augura una reñida carrera, aunque no visualiza a un claro favorito.
“Caminos del Inca es una carrera muy difícil, que te llena de incertidumbre. Yo corrí en el año 1997, éramos 16 carros inscritos en el Grupo A y yo era el que tenía menos posibilidad de ganarles. Al final terminé peleando la punta con Ramón Ferreyros, él ganó la general, y yo la categoría del Grupo A. Eso es Caminos del Inca, muy difícil predecir a un ganador”, finalizó.