Jeep trae al mercado peruano la nueva Jeep Renegade, un potente todo terreno que demuestra personalidad y estilo auténtico. Nitro tuvo el agrado de probar esta SUV que a todas luces llega para ser conducido en todos los terrenos.
Como todos los modelos Jeep, especialistas en off road 4x4, este vehículo muestra un total poderío desde sus características. La nueva Renegade llega al Perú en su versión Longitude la cual pusimos a prueba en los cerros de Pachacamac.
En el interior podemos apreciar un timón multifuncional de Jeep, forrado en cuero con controles de audio y otras características, además cuenta con un panel My Sky, un cristal panorámico con panel trasero libre y un limpiaparabrisas con sensor de lluvia que se activa automáticamente, esto último muy útil por el clima con que nos encontramos.
En cuanto a la performance del vehículo nos hemos encontrado con una ruta muy exigente llena de lodo, fango y piedras. En estas circunstancias hemos puesto a prueba todas sus peculiaridades para subir caminos empinados y es ahí cuando el sistema Jeep Selec-Terrain, nos ha brindado la potencia necesaria para superar las condiciones más exigentes. Este sistema nos ha permitido elegir hasta cuatro ajustes diferentes, que ofrecen la máxima estabilidad de manejo al coordinar varios sistemas del vehículo, entre ellos el control de aceleración, el cambio de marcha de la transmisión, el control de tracción y el control electrónico de estabilidad (ESC) que nos ha permitido subir sin problema alguno.
Por otra parte, el asistente de arranque en pendientes, una característica estándar de Jeep, nos fue de gran ayuda ya que ha evitado que el vehículo en plena subida, estando parado, no retroceda al arrancar con solo accionar los frenos, lo cual nos ha dado tiempo suficiente para mover el pie al acelerador, anulando riesgos de accidentes.
Así mismo, el control de descensos nos fue muy útil con la manipulación del freno, permitiendo concentrarnos en dirigir el vehículo y facilitando la tarea de bajar una pendiente incluso en un terreno complicado como lo fueron los cerros de Pachacamac.
Otra de las grandes novedades es su transmisión automática de 9 velocidades única en su segmento, más precisa, que genera un arranque rápido y un mejor andar constante con una eficiencia excepcional en todas las marchas y velocidades.
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