En el 2014 los carabineros de Chile adquirieron 30 Dodge Charger Police Interceptor, unos vehículos diseñados exclusivamente para el resguardo de la seguridad en la capital sureña.
Estos autos que pesan aproximadamente dos toneladas van de cero a cien kilómetros en ocho segundos y cuentan con blindaje en las puertas delanteras y lector de placa en la parte frontal y posterior del auto. Así mismo, estos vehículos tienen lectores de placas en movimiento, radar de velocidad, tracción y un asiento posterior especial para el transporte de personas.
Estas unidades, que son utilizadas en Estados Unidos, Canadá y México, costaron cada uno 19 millones de pesos chilenos, equivalente a US$ 28 900. Los vehículos peruanos adquiridos por el Perú a Corea del Sur, los Ssangyong Rexton W, cuentan con GPS, avanzados equipos de comunicaciones, ventanas a prueba de balas y un escáner para placas de auto. El Perú compró por 2108 unidades 82 millones de dólares, lo que pondría su precio individual en US$ 38 900
Al respecto, la contraloría ha manifestado su desacuerdo por la compra de los vehículos para la seguridad nacional “Hay una serie de deficiencias en este proceso de revisión, verificación. Estos vehículos no están adecuadamente preparados, diseñados, ensamblados y fabricados para ser un patrullero” Declaró uno de sus voceros.