La tecnología automotriz siempre sorprende incluso a los más sabidos. En cuanto a sistemas de transmisión la evolución ha llegado al punto en que existe una caja de cambios con relación de transmisión infinita, conocida como la transmisión de variable continua.
“Antes las transmisiones utilizaban engranajes fijos de diámetro fijo y con número de dientes fijos, después eso fue cambiando a las cajas automáticas, pero también se seguían usando engranajes, ahora, con estas cajas de transmisión variable continua, ya no se usan engranajes sino poleas de acero, que van cambiando su diámetro de acuerdo a la necesidad del vehículo, si necesita ir más rápido varían en una forma, y si necesitan más fuerza para subir una pendiente varía en forma inversa”, explica el docente de mecánica automotriz de Idat, José San Martín.
Las poleas que menciona el profesor son de acero y la faja que transmite el movimiento entre ambas poleas también suele ser de acero o de algún otro material bastante duro y resistente.
El también ingeniero automotriz comenta que “lo que hace variar el diámetro es que alejan o se juntan. La relación de transmisión es infinita. Ya no se podría hablar de que tiene primera, segunda, tercera o cuarta. más bien es infinita, porque puede variar en un milímetro el diámetro y ya es otra relación de transmisión”.
La diferencia con los otros sistemas de transmisión es que no se siente como cuando se hacen cambios. La transmisión de variable continua se utiliza en los autos de alta gama, en un vehículo estándar no se suele utilizar por el alto costo.